Bienvenidos a la magnífica Masía de “Can Roca de Malvet” de Santa Cristina de Aro. En uno de los parajes más idílicos, y en un entorno de bosques autóctonos, donde predomina la tranquilidad más absoluta, descubrimos esta preciosa Finca de 4.210 metros cuadrados de terreno, sobre los que se ha construido la Masía de casi 416,20m2 repartidos entre la planta Baja y la planta Superior. Esta propiedad destaca por el alcance de su terreno y el encanto que desprende al imponerse al entorno con carácter y personalidad propias.

Cuando entramos por la entrada principal, nos aguarda una puerta de hierro que nos invita a empezar el camino natural que hay dibujado y que nos lleva a pasearnos por el jardín hasta topar con la imponente fachada de piedra de la Masia. Es un recorrido inspirado por la quietud y el reposo completo. En los sentidos nos seduce el aire bucólico del paisaje y de lo que desprende la Finca. De estilo genuino, rústico, y  de nuestro Empordà, esta Masía despierta en nosotros el bienestar, la comodidad y el placer por las pequeñas cosas bonitas que nos ofrece la vida.

Una vez dentro de la Masía nos recibe un gran vestíbulo donde en el fondo encontramos las escaleras que nos llevan a la planta superior.

Desde el vestíbulo, si seguimos en la dirección contraria de las agujas del reloj, encontramos un amplio comedor en el que una gran mesa es el eje central de este espacio. A continuación hay una despensa, y una sala muy grande donde en su interior hay una habitación en la que hay la caldera y otras instalaciones de la casa. Actualmente en esta sala guardan cosas.

Si seguimos avanzando encontramos la cocina con una isla central en medio y una puerta con acceso directo al jardín. Una vez salimos de la cocina nos situamos de nuevo en el vestíbulo de entrada. Y si continuamos a la izquierda encontramos una sala abierta donde la protagonista es una chimenea antigua que va de pared a pared, y en la que destacan dos butacas y una gran tina de piedra que decora el espacio. A continuación hay un baño completo con ducha, y una habitación pequeña.

En la planta superior hay un gran vestíbulo y cuatro habitaciones dobles con techos altos y vigas de madera; dos baños completos con ducha, y como pieza central encontramos una sala de estar con una chimenea. Este espacio es muy cálido y acogedor. Desde uno de los baños accedemos a la parte lateral exterior de la Masía donde se encuentra la piscina, la terraza porchada con la barbacoa y la barra de bar. Esta zona de la Masía es el espacio donde disfrutas de compartir comidas al aire libre, tertulias al aire libre bañadas de grandes zambullidas en la enorme piscina que lidera este ala de la Finca.

En la parte superior de la piscina hay una lengua de tierra más salvaje, que se ha dejado como bosque, y donde la vegetación presente es la autóctona de la región en la que vivimos.

Al lado de la entrada principal de la Masía hay un anexo, que es una habitación doble con baño completo. Antiguamente era un abrevadero para el ganado. Hoy es una habitación, que puede ser para invitados o como sala de trabajo, etc…

En definitiva, es una propiedad que no te deja indiferente, que tiene una identidad única, y cuya condición va más allá de los estándares establecidos. Es una propiedad muy cuidada tanto en su interior como en el exterior. Como  Masía, tiene una perfecta orientación solar.

La casa está dotada de todos los servicios de suministros, y dispone de radiadores en todas las estancias.

Cerca de la villa de Santa Cristina, y de los principales comercios, tiene un emplazamiento perfecto porque conjuga con la tranquilidad y el reposo del entorno con la proximidad de la vida de pueblo.

Sólo cuando la visitas entiendes que existen sentimientos que no se pueden describir.